Esencia...

Cementerio…, sagrado lugar que se queda con TODO lo que se tuvo, mientras duró…, es lo que fue y no deja de serlo, por tanto no morirá...

Tú que guardas restos y desvaneces, pero te quedas con su esencia, mientras no me olvides…, no moriré.

domingo, 12 de diciembre de 2010

Hablemos de Nada

 

Por: Mörthyüz

tataaataaa 

Sabemos mucho de poco y tan poco de nada que nos hace falta una brújula para ir en busca de nuestro destino, que lo mucho es en verdad tan poco, que nos convierte en humo que se eleva por el horizonte hacia un nuevo rumbo sin dirección ni voluntad.

Y en la nada encontramos mucho, que lo mucho que conocemos de la nada, es tan poco que nos lleva a pensar que la nada es absoluto y eterno, un eterno lleno de nadas y unas nadas que no logramos obtener, y no las vemos pues somos ciegos a la inmensa oscuridad y densidad que cruza hacia el lado de la nada, que preferimos quedarnos en la luz de lo mucho y hacernos brillar con su incandescencia, y cegar de ignorancia a los contemporáneos que nos rodean.

Transformándonos en seres llenos de mucho, seres radiantes de luz y brillo que proyectamos hacia adelante, con la esperanza de que adelante no haya obstáculos que frustren nuestro recorrido y nos trasladen a esa incertidumbre que nos causa la nada visible, la nada oscura y tétrica que yace frente a nosotros y que no vemos a pesar de ver, y que no escuchamos a pesar de escuchar y sin sentir aun cuando nuestra piel logre sentir.

Entre la nada y lo mucho se encuentra el Ser, ese estado de “estar siendo”, de ese constante y repetida actualización y reaprendizaje de nuestro Ser, de nuestro único y desconocido amante fiel. Tan llenos estamos del Ser que derramamos mucho de él en distintos sujetos a nuestros alrededores, a pesar de que no se dan cuenta, ellos y nosotros nos embarramos de Ser entre tú y yo ahora yo poseo algo de ti y tu de mi que ambos llevamos algo de nosotros en nosotros sin dejar de ser nosotros.

Sin conocer el Ser cómo podemos llegar a conocer la Nada, ¿Cómo tender el puente que nos traslade hacia la Nada a partir del Ser? ¿Cómo identificar cuando “estamos siendo” y cuando nos dejamos embarrar por cuestiones morales o éticas? ¿Cómo reconocer en nosotros a un Extraño? ¿Cómo saber que siéndose un extraño a la vez seamos nosotros tan conscientes de su identidad? ¿Cómo eliminar la barrera entre Siendo Tu Extraño de ese estar Siendo Tú? ¿Cómo develar la cortina que se tiende entre ambos lados de un mismo claustro si tenemos miedo a tender la mano y jalar de esa cortina? ¿A que le tememos? ¿Qué nos asusta y nos paraliza a la hora de llegar a conocer ese Ser que nos permite el acceso a la Nada?

Porque el humano no está lleno de conocimiento sino de vacios  que puede llegar a conocer.

 

ESCRITO POR: Luis Jesús Oros Y. (Mörthyüz)

miércoles, 27 de octubre de 2010

Acércate

 

fuindifundi

Acércate, un poco más,

Quiero tenerte como ayer,

Ven, deja susurro al oído que te quiero,

Despacio, despacio, y cada vez más lento,

Deja que gaste tu tiempo, deja raptar tu mirada,

Deja quebrantar tus ojos pequeños,

Y ven, dímelo sin hablar,

Enamórame más hasta que no estés,

Para extrañarte un poco más,

Para verte llegar, atarte, y no liberarte más,

Hasta tu próximo regreso,

Ven, acércate un poco más… cada vez más,

Hasta fundirte en mí,

Y extrañarte a cada distancia donde pase el oleaje,

Ven, acércate más, un poco más.

sábado, 25 de septiembre de 2010

Fuera del entorno…

guerrera

Estoy fuera del entorno, y no importa nada,

Pareciera que toda la gente está hueca,

Que necesitan de algo o alguien más para poder subsistir,

O algo que ayude a tener a alguien al lado…

Yo no tengo a nadie… ni tengo un lugar… ni lo tendré…

Tampoco lo quiero… no me quiero apegar a lo que no es mío, porque nada tengo y así será…

Mi alma está en decadencia, y sé que el estado pasará,

Dejaré de existir por un momento, solo por uno eterno…

Para aquello que me he entregado estúpidamente, aquello que no vale la pena, mi pena…

No me arrepiento y sé que lo volvería hacer, pero la sensación de vacío que queda no volverá.

Me quedo con lo afable que robé de ello, en esas existencias que di… me robaron demasiado, de lo que nunca tuve…

Por las ventanas del alma se quiere escapar una fuga, y está fluyendo, será todo ese fluido que no saqué en su momento, por mera soberbia… hoy… y solo hoy dejaré que se emanen y se larguen.

Porque lo que me ha tocado, la gran parte… no vale nada, está hueco, vacío, hay algunos que me abominan, que creen tener algo por ser multitud, a mí no me han irritado, su valentía no es más que simple debilidad, sin espíritu.

Se me ha olvidado que aquello a lo que me abro falsea y vuelvo a presionar la misma teoría,

Tatuar el no esperar…

Esto que la colectividad, y yo, habitamos, está desgastado, se continúa en una mentira, bendito el día en que la verdad ya no estuvo al alcance de todos, por aquellos egoístas, se estuvo en crisis y se sigue estando, que siga oculta.

Ahora yo después de estar tan expuesta, oculto mi interior por nadie, por aquellos que me odian y aquellos a los que amé, por los toman el desgaste a su favor, tras una faceta fría que a veces se diluía y fue tomada luego ignorada.

Seguiré en ningún lugar, por nadie, ya no tengo ningún deber… dejaré de ser esclava de mi misma.

En pie.

jueves, 16 de septiembre de 2010

Eres poesía… eres nada…

 

la-muerte-de-marat-1793

Las palabras no acaban de reflejar la estancia de los cuerpos en sintonía, que luego huyen, las palabras esconden un objetivo que brota como el agua en estos ojos, que sacudo para esconderlas y mojan las cenizas que quedaron, ahora soy más fuerte que el recuerdo, que el humo, que las cenizas, las garras del tabaco y el papel quemado.

Tu cuerpo un emblema, tus mirada áspera y afable, tu calor como el vientre que engendra todo lo bueno y lo malo de mi obra, tu vos decretaba un pacto ofertado en tinta roja como la sangre que corre entre mis manos, a la distancia.

Tus letras son poesía que hiere como el ardor de la lava de la tierra, bienestar como la frescura del viento que rosa el cuerpo ante el azote de una inmensa bola de fuego, tu poesía es como la nostalgia de una hoja al sentir el otoño llegar, la libertad de un ave en su primer vuelo, la tranquilidad de una tarde al término de una jornada, la paz de saberte vivo, la muerte de una guitarra en su funda, el brazalete sujeto en mi mano, el cajón entre abierto que asoma tu recuerdo, todo lo que eres, todo en lo que estás y yo ser como una máquina que espera tu regreso.

Tu eres el tiempo, la hierba, música, mi cuaderno, hojas secas, un símbolo sobre la arena mojada, los cuatro elementos, eres vida, muerte, eres poesía, eres nada.

Un espiral… un ciclo

NOCHE_LUNA

Ha caminado ya tanto, la vereda está cansada y los pasos aún quieren continuar llevando por bandera una promesa, que ofertaba un regreso.

Ella se perdió en el tiempo, pero recordaba a la perfección el día cero, todo un ciclo ahora, ahora… ya es bastante tiempo pero no el suficiente, decía, haciéndose falsas historias y luego él le contaba una tan dulce, quiero escuchar tu vos, esa que por las noches imagino con tan solo claves, la que un día le hechizó con dos palabras, ella contestó tan simple pero con tanto vigor contenido.

Luego los cometidos hicieron tomar rumbos distintos, desde entonces se piensan, desde entonces se dice que existe lo eterno, desde entonces se cubre de humo para no pensar y ahí se encuentran, en la misma fortuna, dolor, ventura, felicidad, mentira y verdad.

Plasmando tonterías, ilusiones, rostros y símbolos que representan lo que no se toca, canciones que van más allá de lo que son, tan exactas.

Desde entonces calman su ansiedad con cualquiera, cualquiera que permita, que brinde, qué más da… En la tempestad es cierto que se puede estar en paz, que ya nada puede importar, que si se pasa de lo dócil a lo irascible, de la miel a la amargura, se acepta sumisamente con el testimonio de que da algún sentido.

Luego se ve venir el dilema del tiempo, alguna vez alguien le dijo que porqué si los peces corren contra la corriente, ¿ella no correr contra él?, No… yo no estoy en tiempo y forma… solo me dejo llevar pero no existe como tal, me rosa pero no lo toco, no puedo contra él, me mueve pero no me lleva, él es abstracto, envejece el momento luego lo mata, pero labra en memorias y nombra recuerdos para suspirarlos en eternidad, contestó.

Y prosiguió, qué sería de esa verdad sin la mentira que encierra, un niño sin su raspón, la esperanza sin el desengaño, bienestar sin dolor, ¿Qué sería de mí sin todo ello?

Un demonio la consume, y ella lo permite, ese que vaga por la noche, y que se extraña como cuando una mezcla de gases cubre el lucero y la pureza de la negrura superficial, pureza cubre con pureza, y se hace extrañar, como la pesadez de aquella noche y la visibilidad de la luna, que se pierde cuando el sol se asoma por el costado.

Y sigue sin esperar nada, sigue sin querer la felicidad sin el dolor que le evoca su partida, quiere ver la entrada del sol para esperar su partida y verlo llegar otra vez con la nostalgia de la noche, sin certeza, quiere volver a vivir el momento eterno para verlo encanecer.

Viajo a donde quiera, lo juro, estoy ahí aunque el caudal del tiempo me mantenga estática, y así será aunque ese demonio mancille la promesa. Ahí… no lo olvido, espera que será literal para saber vuestra reacción, ella creía que todo sería mejor.

Un diario ya un ciclo, gritaba al viento, nada es nuevo, aunque lo has desgastado, vives, gritaba más fuerte, luego te mato, respira este viento, suspira mi alma, quemaré tus pulmones, intoxicar tu cuerpo y violar tu alma. Con la inocencia de lo que ella le da sin esperar, lo que él toma y corresponde sin querer.

Crearon energía para hacer vibrar, inconscientemente, ella ama al inconsciente luego le hace reclamos por regresarla a un cuerpo inútil por la impotencia, pero no reniega de él y de los tontos sentidos carnales si estos han sido el conducto.

Largo como este ciclo, como la inmortalidad del tiempo, y tenue se ha dejado fluir…

miércoles, 25 de agosto de 2010

El sueño en un sueño…

sueño

Rompe el silencio, no pienso resistir más,

Un vacío engrandece, pinta el acero,

Una mirada tuya endulza, tu palabra quiebra,

Los símbolos en código ya no dicen nada,

Cada quien aclara lo interpuesto a favor, y en contra.

Y nadie se preocupó por darle un sentido.

El niño sigue pidiendo el pan,

El ave emigró al sur,

Yo busco mi norte,

E imploro la promesa clavada en una memoria de un sueño que no existió,

El sueño de un sueño,

Maldito consciente, inconsciente de lo que pasa alrededor,

La erección de una pasión que revive luego asfixia,

El placer de sentir dolor, que despierta a la bestia para bailar un vals con ella.

Gira y gira, aprieta la garganta… deja sin aire… pero lo ama.

El canto de un ángel, en rugir de los demonios,

La voz de un amor, el ruido infernal.

Los restos del arte que mueve una pasión, que no deja mover.

sábado, 21 de agosto de 2010

Agonizando

crep

Pequeña, tan frágil como un metal,

Seguía sentada… a unos kilómetros de él,

El frío no le quemaba,

Su olvido no lo olvidaba,

Su cielo ya no lloraba,

El sol ya no encendía,

Su cuerpo permanecía postrado sobre un suelo frío,

Su alma persistía en alturas,

La noche le escoltaba,

Esperaba su llegada en la puesta de un crepúsculo,

El cielo ya era tétrico, apagado,

Las nubes se aclaraban, como si fuesen mancha en el firmamento,

Y una estrella a un lado consolaba su mirada.

El Dios ya no escuchaba, y ella ya no pedía.

Él, escondido en una esquina, lo cubría una bóveda desgastada,

Buscaba un asesino, que matara esa mirada,

Él quería venganza, para la autora de su hastío,

Cansado del cuento de nunca empezar,

La fatigada imaginación mató la ilusión,

En el fondo de esos dos, ya agonizaba la esperanza.

jueves, 29 de julio de 2010

Principio sin fin/November Rain

 


 

Porque nada es para siempre… y todo se transforma, permanece en el historial de una vieja alma cada vez más vieja, el tiempo es relativo con la presencia, y las presencias huyen de mis manos, fueron mías solo mías, todo tranquilo, ya no se escucha el viento latir, ni a lo lejos ni a la vuelta de mi refugio.

Todo en paz, la gotera hace su misión, y el hueco profunda a la caída de cada gota que se tira al vacío, gotas suicidas, dan espacio a más recuerdos, más dichas, mas calor.

Substancias que se aguardan en el almacén, y éste las aguarda con tanta ventura, entren todas y cada una son bienvenidas a esta rueda que gira y gira, adversas y gratas, suban y suban…

Esto es el comienzo, es el principio sin fin…

sábado, 17 de julio de 2010

Por fin!!



Por fin ha llegado el día, como cualquier otro pero más deseado, para descansar de la farsa, el segmento en la dimensión lleno de mediocridad, y no se cansan, en verdad pareciera que no, me retiro y tapo mis oídos, prefiero escuchar alguna buena creación o mala… de cualquier manera resultaría mejor, luego vuelvo a plasmar su rostro, enciendo el cigarrillo y cierro los ojos, me voy y hago preguntas al viento que se las lleva a mi norte, luego el me deja la incógnita, sin esperanza espero, y ya no espero nada… sin temor a decepcionarme, no esquivo el dolor si este es mi conducto para suspirar tu alma una vez más.

Y hoy es el día, alguien me espera y lo sé, esta vez no podría ser mejor después de las últimas horas sin sueño, de recordar y favorecer a aquellos inútiles mediocres a cambio de algo, esta vez es así después de tanto hastío, de que tú y tú juzguen, ya ni es lástima ya es nada.

Solo fue una descarga, están bien las inútiles existencias solo por distinción, mi otra parte es todo lo que me queda, lo que me queda es pasajero y solo mi yo permanece, pero mientras esté a mi lado… ese otro segmento, parte de mí, los perpetuaré y luego se van, aunque cambies como ahora… ha quedado, y eso ni tu demonio que amo lo podrá cambiar.

Por fin ha llegado el día y me voy, no se actuar en el juego y no me importa mostrarme diferente sin aceptación, que no aceptes que te amo, que la vida se me escape entre los dedos, que te alejes. Hasta que muera mi alma eterna, mientras parten.
Por fin… llegó el día, aunque dure lo que un sueño.

jueves, 24 de junio de 2010

Desde abajo... Sos estrella (*)


Quien diría que nos adjudicamos tanto por dentro y a otros, somos tan propios y dueños de nada. ¿Quién nos contempla desde la imponente bóveda al caer la formidable noche?


Cariño, imagino que te encuentras allí, mi estrella, la única que alcanzo a distinguir entre tanta adversidad. ¿Quién te abandona y porqué lo ejecuta de esa manera?, tan alto, desprendiste tu alma, dejaste tu cuerpo postrado sobre la tierra estéril, tan blanco, tan blanco, el rastro de su camino sobre tu piel, tú, de vivaz errar, gorra peculiar, voz suave y sonrisa eterna.
Ahora callas, suspendes tu camino para volar tan alto, tan alto, desterré esa lágrima color carmín, dejando su senda sobre un rostro ya frío y en su rastro me quedé, su huella se mantiene reproducida ante mi mirada.


Cierro los ojos para verte mejor, para relevar la última imagen que te robé, la que ni una sola fuerza cambia y tiene el poder de perturbar.


Una canción, dos días de tu última memoria, tres sitios, cincuenta besos, mil sonrisas, tus antologías, el mar de agua con sal y todo en silencio en tu guitarra.
Y la carta, la que siempre llega tarde, acompañada de una nota desafinada descifrada para ti, hacerle cenizas para que todo fuese perpetuo.


Querido, tan alto, tan alto, desde un lugar tan bajo te observo y te hablo desde la inmensidad que cubre el silencio.


Alzo mis brazos al viento para tocarte, tal alto, tan alto, desde aquí. Egoísta aquella mezcla de gases que te esconden de mi mirada para dejarte descansar y yo para invocarte una vez más, y esconden tu luz, benditas que me dejan su suspiro con olor a ti, mi cabello baila a su son y yo te respiro larga y profundamente una vez más, me voy.


Tal alto lo observo, desde aquí, lo bajo, desde allá aquí tan pequeño, solo define una palabra, la de un ser que no se va, la de ese que se ha ido y dejó parte de su naturaleza para persistir, por siempre y hasta pronto. lm/


Incompleto, se siente.

viernes, 11 de junio de 2010

Cosa o.o



Hay entes que no tienen la dicha, y doy mi más estéril condolencia, cosa, mi declamación esta vez se dirige a ti, cosa, en un día ordinario, sin tiempos y con obligaciones, no te importó e impones tu voluntad, ahora quieres llegar, hoy, tiene que ser hoy, un día común y corriente, más corriente que común, no te esperamos, llegaste cosa, con dolor de quien te ha recibido, nervios de quien a vos a rodeado, flujos que corren a través de cuerpos y oraciones que vuelan en busca de algún dios a tu amparo.


Ha llegado la luz, has probado el oxígeno, has dejado ese lugar cálido y has venido a acompañarnos en el averno que existimos. Cosa eres bienvenida, toco tu piel, suave, un pétalo no es nada en su alusión, arrugas tus ojos para que no se adelante la luz, formas muecas que figuran sonrisas y de pronto fastidio, tomo tus manos aún puras, pequeñas, como todo tú. Cosa principiante, convicción de los milagros, has llegado y detrás de ti un nuevo sentido, cambias un mundo encerrado, cuál es tu franquicia, qué te da derecho cosa, y hacia tu hechura no pondré objeción.


Esa manía mía de amar la vida, enamorarme de lo que no tengo, amar mientras pueda, mientras me concedan y cuando no también, me llevan a adjudicarme lo que no me pertenece, lo que no he creado. Cosa mía, has llenado de júbilo la dimensión para quienes tienen predilección a tu llegada, cercanía hacia ti.


Hay circunstancias que hacen dar valor, aunque luego pasen y no se tengan presentes, aunque no sea de importancia en común, como la migaja de pan que el señor de buen traje tira, la vida de los insectos que pisamos protectores de sus frutos. Cadenas de lo sublime y lo mínimo.
Hoy un gran día para una fracción de especies, la energía está junta, como si estuviese reprimida de tenerla dormida en tu espera. Pequeña, aun sucia de tu tránsito y pura a la vez, aún inocente.


Cosa has llegado para acompañar a un pegote!


Jiji ;)

domingo, 6 de junio de 2010

(=) Oscilación...

Parecía que todo andaba mal, de nuevo, disparaste unas cuantas palabras de esas que fluyen saciando la sed de incomprensión. Esta vez la herida no ha sangrado, esta vez no, tal vez de tanto ser rasgada se ha secado, pareciera un ciclo, ya no percibo su profundidad y hasta dónde ha llegado, si ha tocado lo que resguardé solo para ti, solo a ti te pertenece ese cálido sitio que no ha de dar lugar a engendrar malditas energías.

Eres un algo, un todo, una memoria plasmada en mi memoria reproducida en mi torpe cabeza, como un cuadro abstracto que inspira y colorea una sonrisa sobre mi rostro. Mi deseo el lazarillo de mi imaginación…

Y todo estaba mal, de nuevo, una espina nos incomodaba, una pasión me condenó y ahora soy un reo atado con cadenas que huelen a libertad, y ya no fluye, nuestro líquido se ha estancado, pareciera que ha caducado con sus mermas en grito de auxilio a oídos sordos.
Se terminaron las ganas, y yo tengo ganas de no tener ganas, el huracán se fue y vuestra tormenta cesó.

Luego de vuelta una palabra abraza el aliento, la ilusión toca a la esperanza, el dios me regresa a adán (ja), y vuelvo a naufragar en lo enigmático de tu mar, vuelvo a arder por lo inestabilidad de tu ser, tus sales me envuelven, esta vez no irritan, esta vez no.
Costumbres.
Necesidad.
Monotonía.
Egoísmo.
¿Amor?

El buen guerrero falló… oh excepción.
Pero siempre dejaremos una huella... C=

domingo, 23 de mayo de 2010

Fallo del fallar de la memoria...


¿Recuerdas lo de antes?, mientras reposo lo que hiciste y has dejado de mí, hago reproches a mi memoria, y le pregunto a ésta desequilibrada, porqué si confiaba en su fatídica misión, ahora le da por tener mención, no quiero volver a elegir entre ella y la flaqueza del olvido, una esperanza inútil.


Gris es el abismo donde vas, mientras mis pasos me conducen al averno, toco tu beso en mi piel y apago mis ojos mientras tú me jalas contigo y sin ti, corazón sombrío, ya no más, hice mi sentencia y el resultado no disponía de vuestra unión, ya no más, un día de estos lo he de lograr, careces de color y yo no tengo más que un desgastado carboncillo, te cansaste de mis tristes líneas fantasiosas.


No volveré a creer, no de nuevo, mi sustancia no me permitió ser a mí, doblegándose en tu poderío, no controlo la cólera de que pasó frente a mis manos y no lo detuve. Ahora mis dedos tocan el líquido color carmín que brota del suplicio, y no te volveré a encontrar, a ti, si, ese que fuiste en un arrebatado y accidental instante, luego ver por la ventanilla alargar una distancia y el impacto de tus caderas en sentido contrario. En mente solo dejarte atrás, que nunca te vi, nunca te tuve.


Luego de verte hoy, sobre aquel pasaje entre tanta muchedumbre, me quise detener, una culpa, el orgullo, mi deseo y falta de valor, algo se interpuso y me fui entre la corriente, cincuenta palabras mencionadas llegaron a tu hastío y hoy tengo un juego con solo dos, no te las marco, ya no después de tanto exponer, solo la confusión, solo tu respuesta bastará para el rumbo de lo perdido. Todo fue por ti, no lo ves, y peor yo nunca te vi hacerlo. Y aunque lo prometiste, ya no te creo, ya no.


Todo por el desliz de la memoria, el fallo se su saber fallar, si todo estaba en dirección.

Como la paradoja, eres.

viernes, 14 de mayo de 2010

Juicio a un final...


Cuántas veces susurraré al vacío un término de predilección a tu indolente persona, e inútilmente, contaré las mentiras a estas páginas, reproduciré tu imagen dentro de este negro café y tararearé la misma canción.


Y para qué dar detalles, teniendo presente tu autonomía, imagino querido que alguien te despeina, acaricia tus labios, cierra los ojos y te ama al oído.
Cuánto más durará el mismo crujido retumbante en mis sesos y tragarlo como zombi hambriento del elixir sagrado del olvido.

No quiero saber cuánto más, no quiero saber el día del juicio a un final, sin haberte vivido como el pecado que cargo en mi conciencia. Aún no necesito penitencia.

sábado, 8 de mayo de 2010

Una noche, solo una más y otra.


Una noche, solo una más, y todas las que nos restan, la luna me acompaña en la espera inútil hacia ti, esperando que aparezca tu luz ante mis ojos, y hablo con la luna y le pregunto ¿Dónde estás? ¿Quién te acompaña hoy? y si te acordarás de mí, vuelvo a voltear hacia el lugar de donde entre las sombras llegas y tener la dicha de verte aparecer, y mi opción es nula al ver tu luz apagada, y pienso ¿Quién te ha de tocar? y cuáles son tus anhelos, sintiendo la inquietud disimulada por saber que no tengo extensión alguna para hacerte un reclamo, y cierro mis ojos y veo cómo las nubes tapan las estrellas, extiendo mi mano al el firmamento, lo quiero evitar ,les grito que no, que me dejen verlas, soplo contra ellas, ¿Quién te cubre con su ser?, así como ellas tapan los astros del mismo firmamento, ¿Quién cubre la bondad de tu existencia ahora?, que no es de mía y ni siquiera del todo tuya, si no de las fuerzas naturales para hacer otra, que eres tú.

Siento no poder más, escucho una y otra vez la canción que te canté para que se volviera nuestra, y mis parpados pesan aún más a razón de los tuyos que se han de encontrar con gran júbilo y lo que te rodea. Siento que mi cabeza estallará, y no pierdo la esperanza de que llegues, me escondo detrás para que no sepas que me encuentro aquí, solo quiero saber si llegarás, como cada noche, y aunque hoy me lo dijiste una vez más al marcharte, quiero que sepas que mi puesto se encuentra igual, aunque no soy lo que esperas, siento el temor del desencanto. Me marcharé para no perturbarte más, que lo que sea que hayas vivido, lo regocijes sin mi inoportuna mediación, corriendo el trance de tu olvido mientras sigues en mi gastada memoria. Aterrizaré en la luna para soñarte, como ayer, y velar juntas de tu sueño, y que como tú, ella y yo sabemos, mañana nos reuniremos otra vez para seguir tus pasos, una noche, solo una noche más, y todas las que nos restan.

lunes, 3 de mayo de 2010

Sin dirigir mi timón


Y regresé sin dirigir mi timón a donde nunca estuve, si mi brújula siempre me guía mal y ahora debo darle las gracias, si para hallarse me tengo que ir, hermana, tu cometido aunque no ha sido tu esencia, lo has hecho a la perfección.
Al estado de no cambiar ni mi más agudo dolor, ni mi más inhibida existencia, porque el algo conlleva a otro hacia otro, y darse así la cosa para no fiarse en la suerte, más que en tu mano que sin pudor puede.


Y tú, joven, que todos tratan de arraigarte, vivirte más que en vida mi vida, cruzarte a más que un punto y detenerte con temor a acabarte para sí, y que esa extraña aparición no llegue, aléjese señora, no dé un paso más que esto aún no termina, si finalmente todos te cargamos sobre la espalda, de favor ahora no quiera bajar, que queda aún más por recorrer y siento tu pesar y frialdad como tantas veces me has hecho saber que no te vas, los colores que te representan, también lo hacen para mi estancia por aquí, si ese hombre me guía hacia las nubes claras y de pronto me encuentro entre su negrura, en la electrizante energía para bajarme a la tierra en rayo hacia mi cruz.


Y regresé sin dirigir mi timón, aunque nunca estuve en ti me establezco, joven, sobre ti paso a trepar desde tus raíces y entre tus ramas, aunque tus roces me corten, marcan el sentido de estar en algún lugar, dejo que tus hojas me acaricien para luego dar lugar a que como en otoño caiga el olvido y el señor que llaman pasado, dejé a la niña que se aferraba a tejer las hojas de los árboles, para que no pasara el tiempo y detenerte a mi lado, encontré mi vocación, y es perturbar los sentidos y convertirme en uno de ellos, para verte mudar a ti y lo que tuve, y solo eso. Dejarlos ir sin que brote algo en su anhelo.


No lo llamo saber perder, solo sé que no fueron de mi pertenencia, pero me pude robar en un instante parte de su espíritu, y usted, elegante señora que representa no más que una fuerza que a todo ha de llegarle, usted es testigo de todo lo engendrado, imagino que la burlo cuando siento cerca su brisa, su Hoz mágica ha roto mi vestido, y rio ante su hechura pero no me derribo, no apagarás mi creación, solo tendrás mi cuerpo pero mi alma ya desnuda seguirá vagando.

Señora, lléveme como llevé mi vida, solo en un arrebato de mi alocado status, vístame de su elegancia que la caracteriza y no importa que tan modesta sea la forma, que al fin y al cabo de esta vida ya tuve lo que quería.


Fuerza que eres viento, sólo tú no me abandones, que naufrago siendo un simple mortal.

Inmortaliza.


Que regresaré sin dirigir éste timón… como el de cualquier capitán.

jueves, 29 de abril de 2010

¿Dialogamos?


*Necesito hablar contigo...


+....


*¿Por qué no me contestas?


+No tenemos nada de qué hablar.


*Yo tengo tantas cosas qué decirte.


+Pero yo no las quiero escuchar.


*Si te las digo, podré descansar en paz... dame una oportunidad...


+No, no lo deseo, déjalo así, creo que es lo mejor... yo ya descanso sin querer oirlo de tu boca... Aquí ya lo sé todo de una manera más pura.


*Pero me quedé con tantas cosas qué decirte... todo fue muy rápido...


+Lo sé, tal vez así fue lo mejor... solo quédate con lo que tuviste de mi...


*Pero aún no lo comprendo... no puedo... ha pasado ya tiempo... y no logro dejarte partir... tuve que recurrir a ayuda y aun así no me pueden hacer discernir.


+Lo sé, siempre te observo, y pido a los dioses y fuerzas que te acompañen, mis manos están manchadas de sangre de tanto orar sin esperar, sólo quiero que me dejes para ambos descansar.


*Perdón, te pido perdón por lo que dije y no te pude decir, fui una tonta desperdiciando todo una vida, que se resumió tan cortamente, y mi estancia junto a ti fue más corta que la dicha que tuvieron otros.


+Tal vez se pasó muy pronto mi trayecto allí, pero lo poco que estuve, lo hice con todo lo que resulta la extensión de la palabra, y no te preocupes más nena, que aún las fuerzas naturales te acompañan, y yo no las abandono, mi alma continúa viva, debes saber que en mí no hay inquina alguna, yo estoy perfectamente aquí observando las luces de tu ciudad, como las de las estrellas perdido en alguna de ellas.


*Mansedumbre de lo más pedido en aquella época, y ahora solo digo gracias, porque de ti aprendí tanto sin que me lo enseñaras, y ahora como una paradoja me has dado una paz de la que ahora te has convertido.


+Nena, me tengo que marchar y recuerda la canción que algún día te mostré, esa de la que ahora se ha convertido en tu banda favorita, hay un cielo sobre ti y por favor no llores.


*(Solo se escucha un largo, profundo y poderoso suspiro) Levanto la palma de mi mano extendida…


+Hasta alguna vez… por siempre…



Y no llores, nunca llores, no llores esta noche, nena tal vez algún día, no llores, nunca llores, no llores, esta noche.

(Ahora ya son 5... y pasará todo lo que resta.)



miércoles, 28 de abril de 2010

Perpetuarse sin rozes... y reanudar mi rodada de vagabundo...


Hoy me descubrí algo que siempre ha estado, que ya lo había meditado, que sabía y que como cualquier cosa que irrita se oculta entre las profundidades del ser, para ahogarlo y tratar de vivir sin esa presencia que se sabe como una fobia que se oculta para no transigir, ese del dicho sabía perfectamente a qué se refería, y que todos pasamos por eso para sentir hacia algo algún anhelo y decirlo antes de que sea aislado por su voluntad o causas ajenas a su razón.


Esto es como un postulado sin postularse, unos queremos un algo, el algo quiere al uno, el uno quiere al otro, y el otro no quiere nada.


Y recordar que te hice mío, todo mío, solo en mis sueños y también cuando duermo, y esta frígida realidad me recuerda con una bofetada de objetividad que nunca te he tenido, y afligidamente aceptar que no será, apropiarse de tu soberana existencia sin que tú te percibas de ello solo por un soplo brindado, tendría que tomarlo por un llamado milagro de un Dios que un día decidí abandonar, y que cada cosa reinante se empeña en decirme que éste no me abandona, porque a cada instante le hablo, y no sé quién es que me responde, y resuena en mi mente por cada instante como un taladro sobre el asfalto en mi cabeza. Y le ruego que no te vayas, y tú te empeñas en decir que no importa, y yo en no aceptarlo como un caso omiso y voy contra mí misma, con lo que llevé por toda mi vida y me jure que jamás haría por nadie, porque solo me tengo yo. Porque lo vuelves a hacer y lo vuelvo a aceptar, y yo vuelvo a no tener el suficiente valor, ni para tenerte ni para matarlo.


El propósito de hacer no considerable lo secundario, simplemente porque hace estropicio en mis redes, y manifestarme que el que ejecuta no es el mismo al que me he prendido, sin derecho a censurarlo porque no existe ningún privilegio más que nuestro nexo franco. Dejarte vivirme solo cuando quieras para agrandar tu pobre existencia, y con tu labor has agrandado la aún más jodida mía. Si he dado más de lo que soy, me han dado más de lo que merezco y de lo que doy.


Para no hacer más que morar un estado que tiene más poder que el que yo puedo controlar, persisto como una roca ante el golpe de las olas del mar, porque así lo quiero, sin importarme la erosión ocasionada para darle algún sentido a esto que me rodea, ya saber, preceder y aceptar lo que sé que después vendrá, que no es para siempre, que después se te aproxima algo más y lo aceptarás porque es tu vida y tu pasión, porque eres tú, y darle de lo que me das a mí, como le atribuiste a alguien más, y le halagarás a aquello ajeno que te espera, y yo como cualquier forastero tendré que partir y continuar, y ante a aquel veredicto, como culpable, declaro que acepto mi sentencia.


En mi paño atado, llevo lo que en apariencia se dice un nada, y lo que me diste en palabras desprendidas de donde fueron vertidas hechas para ser tiradas al viento, las atrapo para llevarlas con mi estaca en el lienzo, y lo dejo caer sobre mi hombro para marchar de éste punto.
Ser un vagabundo más, solo un aprendiz de ti y de mi porvenir.


Y no hago más que darle vueltas a todo esto, sin llegar a ningún lado, y paraqué me hago la demente si esto es precisamente lo que deseo.


Solo una bola de signos más sin ningún código formado… porque no se encuentra tal.


Dar un nada... y me enriquece

Que efecto de júbilo se advierte cuando la bendición de un dios de un ser existente y cotidianamente imperceptible, cae sobre mi naturaleza, cuando doy algo que me remunera más de lo que di, lo que no me ha costado absolutamente nada propinar.

Para que siga con su útil e ignorada faena, de alguna manera su intención me hace más falta a mí, si ya tiene su protector, solo queda corresponder por mi parte que tiene menos espíritu, pero se revela de una forma veraz.

martes, 27 de abril de 2010

Ser un rayo, desde mi infierno...


Mis hojas están rotas de tanto querer decir, al igual que mis alas de tanto intentar volar, para estar allí, porque ya no sé si detener el tiempo, o con estas yemas darle cuerda al reloj y tachar los días del calendario al ritmo de una bala cuando se jala el gatillo, y dejar pasar el tiempo absurdamente, simplemente recordando el ayer, malgastando el presente, dibujando tu rostro, imaginando dónde estás, porque es lo único que queda, y éstas líneas mal trazadas, haciendo un inventario de lo que tuve y tengo, y me pregunto ¿Qué hago con este cementerio? Con los restos de un momento inexistente como tal, si éste no tiene fin, se ha detenido y siento seguir viviendo.


Y mi piel se sigue secando, y mis plantas se han gastado de tanto caminar y recorrer tu espacio, el espacio que me rechaza por la insistencia de querer continuar, seguir donde ya no estás, donde no hay más.


Obstinarse en lo cautivante que deja sensación de malestar, como una espina clavada, como el rayo que quema mi piel y me vuelvo a posar ante él, como ahora tú lo haces, querer ser como él, poder quemarte a ti y darte un poco de lo que soy, que de alguna manera sientas mi llama encendida en un universo, donde con la luz de las estrellas, mi imperceptible se pierde.


Un día decidí apagarla para regresar a mi infierno, y poder habitar mi olvido, pero sus llamas te vuelven a encender. Y si residimos en una misma dimensión ¿Por qué tenemos mundos distintos?, ya todo se cierra, bueno para poder salir de la ecuación, y recordarme que todo es tan, pero tan simple, como el niño que llora porque el viento se llevó al cielo su globo, y que todo tiende a ser así, déjame evaporar, que me trague la tierra, que el viento se lleve mis cenizas o el mar me hunda en su enigmática profundidad.


Regresaré para decirte que valió la pena mi odisea… y estar contigo.

sábado, 17 de abril de 2010

Lo mío, lo fiado...



A mis hermanos


El ser humano, generalmente no le hace honor a su denominación, unos tenéis la capacidad de sensibilizar, otros de ser sensibles, otros ni uno ni otro. Y siempre tendremos algo blando, y el qué fingir, lo oculto, lo hipócrita y lo lleno de su verdad con su capacidad de transmutar, porque hay cosas que lo son para siempre aunque no lo duren, y se quedó la percepción, porque hay relaciones que son más fuerte que la erosión del tiempo en ellas, más puras que el amor que se dice tener a un Dios, y más libres que las de un par de amantes, porque no los ata ninguna rúbrica, de haberte odiado alguna vez, y anhelarte muchas más solo por lo que eres.


Porque no sintoniza un mismo vuelo, pero pertenecemos a una misma fracción, se tiene la manía de herir y no queda inquina alguna, lo de mas es lo falso, no hay algún compromiso más que lo que por dentro se ha generado, en el que no se piensa como tal, y no se falla.


¿Porque no hablar de una buena relación?... porque éstas no están presentes pero jamás se han alejado, como si fuesen más que una unión de sangre… porque éstas perduran, porque no buscamos nada, porque no habitamos en una misma extensión, porque no importan.


Los porqués…. Porque simplemente peregrinamos solos y así terminamos, amamos, y sí, nos dejamos atrás, y así debiera ser en todo antes del deterioro, y que quede por última esencia lo que menos valió la pena. Porque lo que literalmente dura para siempre, lo que menos valió.


A ti, porque como tú vendrán muchos más, caminando nos rosamos como pequeñas bolas de energía que se aparecen y al dar clic, se esfumaron, y pudimos ser mucho más. Me queda seguir y no buscar, porque el todo ya lo tuve frente a mí y en mis manos, y aquí se ha quedado.


Porque son y solo son, eternos.



----------------------------------------------------------------------------------

Al ciego de cesar que perdió los lentes por mi culpa... (espero alcances a distinguir)


A mi hermana gemelísima de otra dimensión distinta a esta Bricho, Guada, Chantilly, Luis, Angel, corazonas y corazones.... ja*

a Marisuela y por supuesto a mi Bruja Pita...

(Y)

El lápiz bajó del vuelo a un par de brujas...


Las minas no plasman lo universal...

martes, 13 de abril de 2010


Si tan sólo regresara Orfeo, no aclamo su ayuda divina, aclamo tranquilidad a el alma perdida, todo lo que pudo lograr con su poesía, su arte, lo que estas lograron en mí, y viajando como si fuesen sueños, como Él, todo lo que os mueve se define en una sola palabra, y como una ironía esta no puede ser definida, y solo nos imaginamos el contrario.



De sentirse la mujer por la cual ha bajado al inframundo, hubiera sido mejor quedarse ahí, o morir junto a ella en el intento.



lunes, 5 de abril de 2010

Soledad mas acompañada que nunca...


Solo, y nada más, caminaba solo, pisando el suelo húmedo del llorar de su bóveda que aún lo acompaña y que no lo deja, que él lo olvida, y que todo el tiempo le observa y él se esconde bajo mezclas duras. Tratando de no existir y de no vivir, de no querer hacerlo para no sentir, solo, quería perderse en el olvido, perdido entre ideas e imágenes gastadas que no existieron, creadas con el humo de su cigarrillo, formando compañía a quien acaricia, hace el amor y como siempre se vuelve a desvanecer.


Otra desilusión más, otra de tantas, cuales busca por las noches para seguir, todo fue como cualquier tren de paso que dejó su esencia, y se fue...
Aún se ve, desde aquí, desde la ventana, se vuelve a observar, habla solo, con sus letras, explicaciones infundadas tocando lo imperdible perdido en sus recuerdos. Sirve un par de copas, siente el sabor del vino pareciera viejo, quieto apaga sus ojos.


Y la besa toda, lento, con delicadeza, luego bailan una pieza, una sola y la respiración se va, pero no la suelta, toman suavemente la copa que contiene aquel vino tinto, su color, como la sangre, el deseo del ser temido, describiendo su propio deseo, su encanto, con el juego de sus miradas, y aún no se escuchan sus voces decirse cosa alguna, cuando ya se han dicho todo. TODO...


Entra el juego de los sentidos, el olor como locura, no dejarlo ir, nada, percibirlo todo, completo, todo para él, él solo y de nadie más, su sabor, ese sabor, único, descubriendo cada vez más.


Todo desde aquella obscura habitación y su lámpara amarillenta, que lo observan y les queda el suspenso, el sofá es testigo, su típico testigo que calla. Aún puedo percibir su energía que está en su clímax, en su punto que aún hay más, la acaricia, desliza y deja sobre aquel viejo sofá, y pasa en él, pasa todo lo que dejó que pasara, y la deja pasar, ahora sus parpados no aguantan más y el silencio se apoderó, el ambiente aún es cálido en aquella obscuridad, y la sangre lo ha mareado.


Vuelve la tranquilidad, el silencio y una pequeña ola del viento es lo que ahora ha reinado, cuando entra aquel rayo sigiloso y ladrón de sueños, sus ojos que aún no alcanzan a distinguir bien, aun lado y sobre la alfombra, una copa pareciera posando con su toque, derramando aquel encantador vino. ¿Y la otra? Y ahora recuerda, y ahora espera quien la vacíe.


Vuelve a asesinar sus noches, vuelve en su dimensión, frío, ahora está frío.